martes, 24 de abril de 2007

El arte de la etnografía

La etnografía pretende observar y describir lo que la gente hace en una determinada cultura, para así lograr narrar sus creencias, valores, motivaciones y perspectivas; o sea pretende relatar las múltiples formas de vida de un grupo determinado de individuos. Para lograrlo es necesario penetrar en el grupo, aprender su lenguaje y costumbres, para obtener apropiadas interpretaciones de los sucesos teniendo en cuenta la subjetividad de sus significados y las condiciones socio-históricos en que se dan. ¿Lograra el etnógrafo percibir esto genuinamente? ¿Qué será necesario para lograrlo?


A través de la primera aproximación a terreno me di cuenta que para realizar un estudio etnográfico fidedigno se necesita mucho más que una simple practica para adquirir el método y con éste lograr sutiles observaciones que permitan penetrar las diferentes capas de la realidad a estudiar.

Ante lo cual, creo que es primordial estar atento a la propia concepción de ser humano que tiene el investigador, su sensibilidad emocional y capacidad de conexión con otro, propiedades que considero esencialmente artísticas. Del mismo modo reflexiono que como futuros practicantes de la técnica etnográfica debemos profundizar nuestra capacidad de entendimiento de las diferentes culturas humanas en todas sus complejidades, peculiaridades y belleza…

2 comentarios:

Carolina Escobar Bustos dijo...

Consuelo,

Me parece tremendamente importante tu reflexión sobre la necesidad de darnos cuenta, como investigadores, de la "mochila" que llevamos a terreno cuando hacemos etnografía.

Me gustaría agregar, además, a tu reflexión un aspecto que considero igualmente importante y que se refiere a que "el etnógrafo no debe olvidar que es etnógrafo" ni que forma parte de una investigación, ya que muchas veces, cuando ingresamos a una comunidad y comenzamos a compartir sus costumbres, significaciones y además creamos lazos, es posible olvidar que estamos cumpliendo un rol. Es necesario tomar conciencia de este aspecto ya que puede provocar "ruido" en los resultados de la investigación.

Ese fue mi "Dato Rosa".

Un abrazo.

Carolina S. Puyol W. dijo...

Consuelo,

Concuerdo con Carolina acerca de que el etnógrafo no debe olvidar que es etnógrafo, ya que al ingresar en un nuevo grupo debemos tratar, muchas veces por medio de un informante clave, contactarnos con los otros para poder penetrar en las diferentes capas de la realidad a estudiar. Y a veces los limites se tornan un poco difusos, pero es algo que también es parte de esta metodología, la cual es toda una experiencia.

Suerte en esta nueva experiencia, esperando que sea provechosa para tí.

Carolina